viernes, 16 de octubre de 2009

Para que el "tiki, taka" nunca muera

Andrés Montes entró en mi vida junto a Jordan (el mejor deportista que he visto), narrando de una manera muy peculiar sus hazañas en la cancha, siempre esas referencias musicales, ese nombrar indistinguible, esa pajarita eterna. Cuando llegó al mundo del fútbol implementó su modo narrativo a un muy lineal patrón, gloriosas frases y conversaciones nos han entretenido viendo partidos mediocres, pulso desmedido y afán transmisor nos han llevado de la mano junto a ya clásicos partidos.
Acabo de enterarme de la triste noticia, poco se sabe. Páginas, ahora serán las que intenten transmitir toda su cruda realidad, de la cual yo quisiera quedarme con su denominación del buen fútbol, ese "tiki, taka" onomatopéyico del golpeo del balón en sublime jugada, de esa pared en la que básicamente se resume este deporte de equipo. Gracias por contribuir a hacer más sonora esa expresión idiosincrática del rey de los juegos y con ello popularzarlo, aún más si cabe.

jueves, 15 de octubre de 2009

Cambio climático

Hoy también me apunto al Blog Action Day y escribo sobre tan acuciante problema. No pretendo sacar a relucir la importancia de su planteamiento y resolución, a pesar de que aún hoy es necesario hacerlo a juzgar por opiniones de alto calado, más por su importancia política o económica que por la fuerza de sus argumentos. Sin embargo argumentos y hechos es lo que no les faltan a los defensores del diálogo y la praxis en el evidente panorama.
No obstante si me gustaría apuntar la consabida solución, que no pasa sino por un cambio en el modelo económico e industrial tan proclamado por el pensamiento progresista. Y es ahí donde radica el principal problema, ya que no pasa de ser un mero programa en un ideario que nunca llega a ser efectivamente legislado y sancionado, le pasa como a la educación en este país, no existe una verdadera voluntad de crear un pacto que garantice la efectividad de ese derecho fundamental. Gobiernos, sociedades y demás entes estamos subordinados claramente a la economía, pero ésta no quiere cambiar su modo de operar, sencillamente le es muy rentable y cambios significan pérdidas de rentabilidad. No se dan cuenta que llegará el día en que la rentabilidad desaparezca con la materia prima, y ello es lo que está en juego, su propia ganancia futura, el legado de generaciones por llegar.
La buena voluntad no puede chocar con el interés de mantenerse en el poder, si realmente se prometen cambios hay que luchar por hacerlos efectivos y no dejarse amedrentar por la pérdida de popularidad o diversas adversidades coyunturales ¿acaso los homosexuales recientemente, o la mujer históricamente, no han sufrido todo el daño imaginable por la sencilla razón de defender, con voluntad perseverante, una justicia y unos derechos que les pertenecían preferentemente?
A todos nos implica el cambio climático, pero sobre todo a tí y a mí, desde nuestra forma individual como ciudadanos ahorrando energía y reciclando todo tipo de desechos, vigilando que se cumplan las leyes y hoy por hoy, dando nuestro voto para que se realicen los cambios oportunos para la resolución de los problemas medioambientales que nosotros mismos creamos.

lunes, 12 de octubre de 2009

Desfilar en el XXI

¿Qué valor tiene mostrar la fuerza bélica de un país en su día más especial? Es más, ¿qué valor tiene poseer esa fuerza bélica en nuestros días?
Hoy día los ejércitos del mundo occidental son totalmente obsoletos, sólo basta echar un ojo a los diversos nombres eufeminizados que se les incorpora cuando van a alguna de las numerosas misiónes "humanitarias" o "sociales" pues ya no combaten con ejércitos enemigos, salvo contadas ocasiones. Yo siempre me pregunté cómo se puede imponer la razón con la fuerza de un fusil o un tanque (el terrorismo islamista en territorio foráneo se combate con ejércitos y el local con policías y jueces bajo leyes emanadas del pueblo, se supone). Los enemigos de los ejércitos no son ya quien eran, hoy la guerra teledirigida está por encima de esos soldados con vocación humanitaria (para matar al presidente checheno los rusos no tuvieron que pisar su territorio, sirvió con localizar una llamada y lanzar un misil). El enemigo hoy día es el terrorismo, eso es al menos lo que nos dicen que debemos temer, y éste está aquí y allí, indistintamnte, lo hay en tu vecindario, en tu ciudad y a miles de kilómetros de tu casa, lo importante es que no lo ves. Pero para que estés seguro te ofrezco lo que sí puedes ver, el despilfarro militar, un maravilloso desfile para asegurar nuestra coexión, para sentirnos seguros de que no malgastamos el dinero, hasta que llegan marzos horrorosos y ya nada se puede hacer.
No existen dudas de la gran labor de los soldados en todos esos conflictos armados, pero deberíamos repensar la labor de tan ingesta fuerza bélica, pues el hombre del siglo XXI con la mente puesta en el desarme nuclear, ¿no cabría la posibilidad de ir más allá e ir ahorrando pasos a la humanidad para lograr el fin de cualquier arma?
Sabemos la importancia económica de poseer ejército, de fabricar armamento, de la supremacia de la investigación tecnológica militar, del carácter simbólico y representativo del militarismo, pero ¿acaso no sabemos también de sus incongruencias con el mundo actual y la pretensión de mejorarlo? Es hora de poner a desfilar a la razón y al diálogo y aparcar viejos mitos guerreros.

jueves, 8 de octubre de 2009

Un día después también me uno a La Ciencia en España No Necesita Tijeras

A última hora, pero nunca es tarde si la dicha es buena. Gracias a Facebook y a El País me entero de la iniciativa propuesta por un bloguero para protestar contra el recorte presupestario en Ciencia. Es por ello que me adscribo a tan ilustre objeción, el gobierno no sólo falta a sus promesas electorales escudándose en una crisis cuyas consecuencias vamos a arrastrar largamente en una materia tan fundamental como la investigación y el desarrollo de continuar con este estrepitoso atropello a uno de los índices de riqueza de una nación.
Para los bancos si hubo dinero, son los que nos iban a sacar del estancamiento, aún seguimos esperando viendo atónitos como ellos a juzgar por la subida de sueldos si han escapado. Sin embargo, para el principal motor de la economía diversificada y sostenible, la ciencia y el progreso son las princpales herramientas de sustentación, con lo que parar las bases interrumpe el pretendido cambio de modelo económico tan necesario en nuestro tiempo para un verdadero diálogo social.